Rosul: la voz valiente que redefine el corrido

En un mundo musical donde la voz femenina a menudo se queda en las sombras, Rosul emerge con fuerza y determinación. Con su nuevo álbum “Entre Besos y Corridos”, la artista originaria de Nogales, Sonora, nos invita a sumergirnos en un viaje sonoro que explora el amor, el desamor y las verdades incómodas que enfrenta la sociedad. Este disco, compuesto por 11 canciones, es un testimonio de su vida y de las luchas que ha presenciado, posicionándola como una de las voces más necesarias en el regional mexicano.
“Este es un álbum de amor, desamor y esas historias un poco más rudas. Yo compuse y produje el álbum entero. Cada canción es un pedazo de mi realidad”, compartió Rosul en entrevista, mientras su mirada refleja la pasión que le pone a su arte. Con una mezcla de corridos tumbados y tintes norteños, este trabajo se convierte en un diario musical que da voz a experiencias auténticas y a luchas sociales.
Historias que raspan y resuenan
En “Entre Besos y Corridos”, Rosul no se detiene ante lo superficial. “Hablo de enojo, traición, pérdidas y también de temas que duelen en nuestro país como el clasismo y el racismo”, explicó. Su música no solo busca entretener, sino también provocar reflexión y abrir diálogos sobre realidades que muchos prefieren ignorar. Temas como “Clasismo y Racismo” se alzan como poderosos corridos sociales, impulsando una crítica directa y necesaria.
Con su voz cruda y honesta, la cantante se hace eco de las historias de mujeres y hombres que viven en los márgenes, convirtiéndose en un símbolo de resistencia en un género históricamente dominado por voces masculinas. “La música al final no tiene género. Puedo interpretar una canción desde la perspectiva masculina sin perder mi esencia”, señaló, reafirmando su compromiso con la inclusión y la diversidad.
Una mirada crítica a la realidad
Los videoclips que acompañan su música no son meras producciones visuales; son una extensión de su mensaje. “A veces, lo que mostramos es doloroso. Usamos un enfoque irónico para reflejar la realidad que muchos prefieren ignorar”, explicó Rosul sobre su estilo provocador. Con elementos como pistolas de agua y sangre de brillantina, busca sacudir conciencias y poner sobre la mesa las verdades que a menudo se ocultan.
La vida en el norte, con sus complicaciones y matices, también ha dejado huella en su música. “Cuando tenía 13 años, viví en el hotel de mi abuela en una zona roja de Nogales. Ahí me di cuenta de que la vida no era tan color de rosa como uno creía”, confesó, recordando cómo esas experiencias han moldeado su arte.
Un futuro brillante en la música
Rosul no solo se queda en lo personal; su trabajo para series como “Rosario Tijeras” ha sido un parteaguas en su carrera. “Esa serie me permitió hacerme un espacio en la industria y conectar con el público”, dijo con gratitud. Su música ha resonado en las noches estelares, y finalmente, su rostro se ha convertido en sinónimo de las canciones que han marcado a toda una generación.
“Entre Besos y Corridos” promete ser un punto importante en su carrera y una declaración de intenciones. Con su valentía y autenticidad, Rosul no solo canta, sino que grita verdades, y su música se convierte en un faro de esperanza y reivindicación en un mundo que necesita ser escuchado. Así, con cada acorde, nos recuerda que el amor, la traición y la lucha son parte de la vida, y que todos, sin importar el género, merecemos un lugar en la historia.